Mi saludo personal a todos los miembros y Junta de Gobierno de la Ilustre Hermandad y Cofradía Nuestro Padre Jesús de la Caída y María Santísima del Rosario en sus Misterios Dolorosos.
Como cada año por estas fechas nos preparamos para celebrar la Semana Santa, como tiempo especial para los cristianos en que se actualiza la memoria de Jesucristo, de su Pasión y de su entrega por el bien y la Salvación de la humanidad, y el deseo de hacer actual su Palabra, que es Buena Noticia entre nosotros en el mundo de hoy.
Cada cofradía evocáis un momento de la vida de Jesús y todas conformáis así el recorrido de su vía dolorosa. Sois parte de una memoria de la historia de la Salvación de Dios. Sois imagen que perpetúa en el tiempo el sentido y el valor del amor más apasionado de Jesús por el bien de la humanidad. Ponéis, así, en la Semana Santa Ilicitana el recuerdo a una de las escenas que evocan la emoción y el dolor de Nuestro Señor Jesucristo.
Pero, la reflexión cristiana nos lleva a mirar, no sólo el dolor, sino el sentido que vivió Jesús y el por qué Él fue capaz de dar su vida de tal manera. Porque no evocamos sólo el fracaso de un hombre bueno en su camino doloroso hacia la cruz, sino que queremos comprender las causas y los motivos por los que Él fue llevado a la Cruz y que sentido tuvo para Él.
Jesús vivió su vida proponiendo el Reino de Dios, esto es, en nuestro lenguaje actual seríael Proyecto de Dios sobre el mundo. Reconocemos que Dios nos ha creado en libertad, pero una libertad para destruir la vida, oprimir al prójimo, para explotar al débil, para destruir la vida de los indefensos, ni para que dominen los poderosos sin escrúpulos. Si no, para que podamos elegir nuestra forma de ser personas, desde el respeto, la paz, la solidaridad, la justicia y la dignidad humana. Algo que Jesús defendía siempre proponiendo un estilo de ser persona en el mundo, y por lo cual se enfrentó frente a los poderosos de su época y fue rechazado. También defendía un mundo donde se reconociera a Dios como creador y guía, y se enfrentó con aquellos que escluían a Dios de la vida, o lo degradaban.
Jesús luchó contra todas esas injusticias hasta dar su vida, con la coherencia de su Palabra. Jesús sufre la Pasión, el camino a la Cruz, para defender al ser humano de toda opresión, de toda marginación y de la negación de Dios, y proponer una forma de ser más humana, más solidaria y creyente en el mundo. Por ello, seguir representado su Pasión conlleva también que vivamos el sentido en el que Él la vivió, y sepamos dar sentido y valor a lo que hacemos, dando importancia a lo estético, pero también al valor original que vivió Jesús.
Recibid mi consideración y valoración por vuestra participación en la Semana Santa Ilicitana como Hermandad de la Parroquia de San José, y a todos los que hacéis viva vuestra Hermandad, así como mi apoyo también a la nueva Junta Directiva.
Que Dios os Bendiga a todos.
D. Vicente Miguélez Miguélez
Consiliario espiritual de la Ilustre Hermandad y Cofradía Nuestro Padre Jesús de la Caída y María Santísima del Rosario en sus Misterios Dolorosos