El pasado fin de semana se celebró el acto más importante de la Cuaresma en nuestra Hermandad como es la Misa y Pregón de la Hermandad.

Especial interés levantó el nombramiento del Pregonero de la Semana Santa 2015 en nuestra Hermandad, como fue el de Alberto Pastor, una persona conocida e involucrada con la Hermandad y con la Semana Santa. Las expectativas se superaron con creces ya que pudimos escuchar un Pregón de lo más emotivo que recordamos en los últimos años, donde el Pregonero dio un repaso a su vida cofrade, intimamente ligada a su vida familiar que le enseñó a apreciar y mimar este tesoro que es la Semana Santa.

Próximamente, publicaremos un artículo exclusivo de este hermoso Pregón además de insertarlo en nuestra web.

Previamente, el párroco de San José y consiliario de la Hermandad, D. Vicente Miguélez, ofició la Solemne Eucaristía de Cuaresma de Hermandad donde, a su término, bendijo las medallas que se le impusieron a los nuevos hermanos tras el juramento de las reglas de la Hermandad.

Nuestros Titulares lucieron radiantes en el Altar de cultos preparado por el equipo de Priostía para tal ocasión, en un altar a dos niveles situando en el primero a Ntro. Padre Jesús de la Caída, que estuvo expuesto en Devoto Besamanos durante todo el día, escoltado por dos ángeles mancebos de su Paso de Misterio y exornado por dos jarrones de plata con clavel rojo. La Santísima Virgen lucía en el segundo nivel, precedida de abundante candelería y también exornada por dos jarras de clavel, en este caso, blanco. Este año, la Virgen del Rosario no portaba su terno de hebrea, tan característico en Cuaresma, e iba vestida de Reina, tal y como la contemplamos en su Besamanos celebrado dos semanas atrás. El fondo lo componía un dosel formado por la bambalina delantera y dos varales del paso de palio de María Stma. del Rosario, tras los cuales colgaba un cortinaje de damasco.

Con el juramento de las reglas e imposición de medallas, la entrega de las insignias de plata a los hermanos que cumplen diez años como hermanos y el característico toque de tambor de La Caída, finalizaba el último de los actos de culto interno que celebra nuestra Hermandad.

Para terminar el fin de semana, la Hermandad organizó una convivencia de hermanos en el Colegio Salesianos de Matola, que contó con una gran participación de hermanos, familiares y amigos.

Fotografías: Rosmari Valentí